Sit amet

La imagen ha sido cedida y es obra de Almudena Arbós. https://almudenaarbos.jux.com/

viernes, 2 de marzo de 2012

INVERSAMENTE PROPORCIONAL


Entre las innumerables cualidades y/o virtudes que me adornan, destacan dos sobremanera, belleza e inteligencia (con dos cojones). A la primera (dada mi modestia, que  con prístina claridad dejan entrever estas líneas  primeras) no la  tengo en consideración…a la otra sin embargo le profeso desprecio, si pues esta, de la que hoy e de hablar, es enemiga irreconciliable de la felicidad, sin peros, rotundamente, lo afirmo sin miedo, y aunque para algún alma cándida pueda considerarse ofensa, felicidad e inteligencia son proporcional e irremediablemente inversas, y no, no es un brindis al sol revestido tan solo como consideración, sino que a todos los efectos , lo promulgo cual decreto.
Porque? Porque, el embelesamiento melifluo, el poder de abstracción que sin quererlo, sobre algunos pueda ejercer por ejemplo, una mosca en vuelo, sin ir mas lejos, la intrínseca segregación salivar que el hecho, puede  provocar en dichos sujetos, fácilmente y sin pudor  puede vincularse a la felicidad, cuando no es otra cosa en realidad, que evidencia de frontera intelectual, la barrera última antes de alcanzar el estatus de que se ha dado toda la vida en llamar, (aún pecando de políticamente incorrecto) ser subnormal.

2 comentarios:

  1. jajajajajaja...
    De todas formas mejor subnormal y feliz que inteligente y crujido.
    Jajajajaja...

    Lo que me sorprende que no haya comentado nadie. Quizá sea una entrada muy borde, mejor mordaz...jajajajaja
    ;-)

    ResponderEliminar
  2. de borde nada...real como la vida misma...la inteligencia no es más que una tara a la hora de vivir tranquilo...como vas a ser feliz con tantas ambiciones?? seamos subnormales, por mal sonante que sea...

    ResponderEliminar